~Se alejo de toda forma de vida, su único temor era el perderte…y lo hizo. Lloro desconsoladamente entre las sombras, su única compañía fue el silencio...Ho! y aquella hermosa luna que adornaba vuestras noches también estuvo allí junto a ella…pero tu no.
Observo sus manos temblorosas sin consuelo aparente y dejo caer lágrimas de sangre, que alguna vez habían sido de felicidad.
Imploro a la Luna que se alejara, no quería que ella le recordara a ti y se sintió más sola al verla alejarse…
Si tan solo hubieras luchado por ella cuando se alejo de ti! Si realmente hubieras sido más fuerte que ella!
Ella ya no quiso pensar en ti, pero lo hizo…
Sufrió, le dolió el pensar que la habías olvidado, es verdad aquello?
Se sentó junto a la oscuridad, perdida entre pensamientos irónicos y remordimientos, culpable por haberte dejado ir.
Sola, se permitió vagar entre recuerdos que casi había olvidado, pero que seguían allí, inmunes al olvido. Poco a poco las lágrimas fueron secándose en su rostro, como cicatrices penetrando en su piel, volviéndola más fría, más rencorosa…
Se levanto con sus últimas fuerzas, cayendo en varios intentos, hasta que lo logro.
Levanto su rostro, mirando al horizonte y avanzo con paso seguro junto al dolor que aun quedaba, avanzo junto a la muerte en cada paso y reprimió suspiros de cansancio.
No durmió, no, no quería soñar contigo, no volvió a pensar en ti…hasta que ella volvió…La Luna, adornando nuevamente sus oscuras noches, la llevo a empezar de nuevo. La guio por un nuevo camino y cuando estuvo al final de él, le recordó su último asunto pendiente…Tú.
Miro a la Luna por última vez y, negándose a hacerlo, se condeno así a caminar junto a Ella entre sombras, hasta decidirse a acabar con su asunto pendiente, hasta alcanzarte y recuperarte…o hasta rogarte que liberes su alma…esa que siempre fue y será tuya…~
No hay comentarios:
Publicar un comentario